Despiden al jefe de la prisión  tras la fuga de México y trasladaron a 191 reos

Varios presos del Cereso de Ciudad Juárez fueron derivados a penales federales tras motín. En cuanto al director de la cárcel fue despedido tras la fuga de casi 30 convictos.

Este martes, las  autoridades mexicanas  aseguraron que habían despedido al director de una prisión cerca de la frontera con Estados Unidos. La cual, el pasado domingo fue el epicentro de un motín seguido de una fuga, de la que escaparon al menos 30 reclusos. Entre tanto, los fiscales estatales en el estado fronterizo de Chihuahua dijeron que Alejandro Alvarado, jefe de la prisión en la ciudad de Ciudad Juárez, había sido despedido y también está bajo investigación por su posible implicación en la fuga, junto con otros guardias.

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Por otro lado, según reportaron las autoridades del penal, unos 191 reos de la cárcel de Ciudad Juárez, Chihuahua, fueron trasladados durante la madrugada del 3 de enero a prisiones federales tras el motín registrado el domingo. Asimismo, el traslado de los presos, quienes están acusados de delitos de alto impacto, se realizó en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional, la Guardia Nacional, la Secretaría de Seguridad Pública del estado, de la Agencia Estatal de Investigación y del personal de custodia penitenciaria.

Los detenidos, fueron entregados a elementos de la Guardia Nacional, quienes los trasladaron vía aérea a los diferentes penales federales en los que serían recluidos. Ante esto, los internos que fueron trasladados están acusados de homicidio, secuestro, portación de arma de fuego, violación y crimen organizado.

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Cabe recordar que el incidente ocurrió el pasado  domingo 1 de enero cuando un grupo armado atacó a custodios del penal de Ciudad Juárez y liberó a 30 internos, entre ellos a Ernesto Alfredo Piñón, El Neto, líder del grupo criminal Los Mexicles. Según reportaron, 19 personas murieron después de que hombres armados atacaran la prisión a unas pocas millas al sur de El Paso, Texas, matando a los guardias y reclusos y desencadenando una fuga masiva que incluía al capo del cartel Ernesto Alfredo Pinon de la Cruz, también conocido como "El Neto".

A pesar de que las autoridades federales llegaron para restablecer el orden y luego encontraron una "zona VIP" en la prisión estatal con drogas y dinero. Entre tanto, durante la noche del lunes, se confirmó que siete personas habían muerto durante enfrentamientos policiales posteriores como parte de la búsqueda para encontrar a los presos fugados. Dos de los muertos eran policías.